El pasado martes al sonar el pitido final, el Regal Barça en conjunto saltaba de alegría después de conseguir el título de Liga. Todos los miembros del equipo pensaban en el momento en el que Roger Grimau y Juan Carlos Navarro levantarían el trofeo, todos salvo uno, Ricky Rubio.
Cuando la pista de baloncesto se había convertido ya en una piscina de cava, el base del Masnou, pensaba ya en cambiar de aguas, quería ir nadando ya hasta los lagos de Minneápolis, su presumible próximo destino. La temporada se había convertido para él en el cuento de nunca acabar, día tras día salían críticas sin sentido en los medios de comunicación: que si se había acabado el "efecto Ricky", que si había "involucionado", etc.
Los Minnesota Timberwolves lo esperan con los brazos abiertos después de recibir el "no" del jugador tras el Draft de 2009. Su mediática estrella Kevin Love ya se ha manifestado diciendo que "está deseando hacer muchos 'pick and roll' con el base una vez se encuentren en la pista'. De hecho parece ser que este año, los Wolves (2º 'pick' del Draft) van a evitar escoger un 'Point Guard' (base) para hacerle un hueco a Ricky.
Así pues, se abre un nuevo mundo para este chaval de 20 añitos, pero que ya ha vivido demasiadas cosas. La NBA lo tratará como una 'estrella' y desde nuestra posición, en España, seguirá siendo un baluarte para la Selección y pos supuesto para el basket en general.
¡Good luck Richard!
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Siento disentir Alvaro, lógicamente lo mio es una simple opinión como la tuya, pero yo creo que Ricky este año ha sido el año del estancamiento, no ha sorprendido a la ACB, no a sorprendido a la Euroliga y muchos bases han demostrado ser mejores que él, Huertas, Teodosic o incluso Sada. Igual no tienen su potencial, pero su temporada fue muy buena.
ResponderEliminarAhora esta el dilema en saber como encaja Ricky en la NBA, que nada tiene que ver con Europa, juego más físico, más rápido, más loco... No tengo claro como le afectará, esperemos que muy bien.
Diego