Lakers, Celtics, Heat, Magic,... Todos entraban en nuestras quinielas para ser los mejores equipos este año, suponiendo que encabezarían sus divisiones y que llevarían el factor cancha hasta que se enfrentasen entre ellos. Todo estaba preparado de esa manera, Bryant y Gasol llevarían a los laker al liderato del Oeste, los Boston Celtics con su recién llegada "dupla O'Neal" tendrían una de las mejores combinaciones frontcourt-backcourt de la liga, los Miami Heat aplastarían a todo rival que pasase por el American Airlines Y Dwight Howard ofrecería nuevos movimientos que llevarían a Orlando Magic a una nueva dimensión. Pero, este año un invitado inesperado se ha colado en la fiesta, los San Antonio Spurs.
El conjunto tejano se presentaba a finales de octubre con una plantilla a la que todos los críticos veían un fallo: su media de edad. Los norteamericanos, amantes de las estadísticas, veían que los pilares del equipo seguían siendo los mismo rockeros de siempre: un Tim Duncan en sus últimos años en activo y que se resguardaba en su magnífico tiro a tablero, un Manu Ginóbili al que le quedaban ya muy pocos triples por meter, un Tony Parker que parecía que no estaba, un Antonio Mcdyess al que le pesaban y mucho sus años en la pintura y un Richard Jefferson que a pesar de su cambio de aires no conseguía volver a ser el de Nueva Jersey. A su alrededor florecían pequeñas esperanzas como el "robo del draft" del año anterior DeJuan Blair o Gary Neal, un rookie que al parecer había pasado de puntillas por la universidad y por los primeros puestos de la elección de 2010.
Al comenzar la temporada y pasando mes tras mes, todo cambió. Las estrellas que siempre lo fueron resurgieron de sus cenizas para hacer disfrutar al AT&T como hacía años que no se veía, los rookies y sophomores como los anteriormente nombrados se consagraban como jugadores con gran proyección de futuro, confirmándose además en el All Star de Los Angeles, ganaban a Lakers, Heat y Mavericks como si de rivales de segundo plano se tratasen. Y terminarán como líderes de la NBA siendo quizás probablemente los únicos afortunados que lleguen a las 60 vistorias esta temporada.
Así pues, analíticos, periodistas, aficionados, entrenadores, etc. no se fíen nunca de ningún equipo que por mucha edad que tenga presente en su roster tan seria cantidad de nombres que fueron en algún momento MVP's o campeones de la NBA,. Poruqe como dice el dicho, los viejos rockeros nunca mueren y , esta vez, estaban olvidados.
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